lunes, 4 de octubre de 2010

DECLARACIÓN PÚBLICA PROFESOR JAIME CONTRERAS EN APOYO A LA CAUSA DEL PUEBLO MAPUCHE.

DECLARACION PÚBLICA

“Oh Chile, fértil provincia (…) la gente que produce es tan granada, tan soberbia, gallarda y belicosa, que no ha sido por rey jamás regida ni a extranjero dominio sometida”, dijo Ercilla, el poeta español, apenas conoció a los mapuches en el siglo XVI. Entonces avanzó la invasión brutal del colonizador, el despojo sin fin, el arrinconamiento, las rucas quemadas, los niños baleados, la traición y anexión de los territorios mapuches autónomos bajo el yugo del Estado chileno.

34 hijos de este pueblo, en su lucha por recuperar autonomía y tierra han sido detenidos en prisión preventiva desde hace más de un año, por las cadenas de la llamada ley antiterrorista, ley impuesta por la dictadura y usada por la coalición de gobierno llamada “Concertación”. Por eso han efectuado –y efectúa aun hoy un tercio de ellos- una huelga de hambre de más de 77 días.

En solidaridad con ellos y con nuestro pueblo Mapuche, decidí hace 8 días iniciar una huelga de hambre indefinida:

Primero, en calidad de miembro del Grupo de Amigos del sacerdote y luchador social Miguel Woodward, ultimado (por la Armada de Chile a bordo del buque escuela Esmeralda) por tomar posición a favor de todos los humillados y oprimidos, y cuyo ejemplo pervive, inspira e incita.

Segundo, en mi calidad de profesor, de trabajador profesional de la educación; como tal, no sólo encargado del saber y la educación entre los muros del aula, sino llamado al compromiso con las luchas de todos los trabajadores, de todos los pueblos indígenas de nuestra América, de todos los despojados de lo suyo y pisoteados por los soberbios poderosos.

Tercero, en calidad de agradecido, admirador y enamorado del pueblo mapuche.

Los comuneros mapuches en huelga de hambre prolongada en el sur ,
- han logrado, con su gesto, preocupar a todo Chile, y aun al extranjero, por la causa mapuche - tierra y autonomía -
- han logrado la modificación de la llamada “ley anti-terrorista” (aunque atenta aun contra derechos fundamentales, como el derecho al debido proceso)
- han logrado poner en tela de juicio el rol de los llamados “fiscales”, que han usado para los procesos a testigos protegidos, encapuchados y a sueldo del Estado
- han logrado que el gobierno, en acuerdo con el poder judicial, se comprometa a retirar esta semana las querellas por infracción a la ley anti-terrorista en contra de los presos mapuches y, con ello, a dejar sin efecto el testimonio de testigos encapuchados, que son parte sólo de dicha ley, impuesta por la dictadura y utilizada por la Concertación
- han logrado que el gobierno se comprometa a promulgar leyes para impedir el doble enjuiciamiento, civil y militar
- han logrado hacer un llamado de atención respecto a la reforma de la justicia militar, pero lamentablemente la reforma resultante aumenta las penas de los delitos que se cometen en contra de los uniformados, otorgándoles más protección para actuar con impunidad, como lo hacen actualmente en las comunidades mapuches.
- han logrado que el gobierno se comprometa a que los delitos señalados, en las querellas por infracción a la ley antiterrorista, pasen en el lapso de los 5 próximos días, de su calificación de terroristas a la de infractores de leyes comunes, es decir, que los mapuches sean juzgados conforme al derecho penal común y no por la ley anti-terrorista.

Sobre la base de estos logros limitados, dos tercios de los huelguistas han decidido poner fin a su huelga el viernes pasado. Por mi parte, he decidido apoyar aun durante 3 días -que vencen en este momento- al tercio de mapuches todavía en huelga, considerando que su posición, cuya sed de justicia es más radical, es digna de nuestro apoyo y admiración.

Como dicen los 14 mapuches aun en huelga de hambre, “el fondo de esta huelga de hambre de los huelguistas mapuches, tiene que ver con el futuro del Pueblo Nación Mapuche. Las distintas comunidades mapuche seguirán luchando por el derecho al territorio, seguirán defendiendo su derecho a vivir como mapuche y negándose a ser asimilados por la cultura chilena” y agregan que esta lucha no podrá sino “acarrear nuevos conflictos con la justicia chilena.”

Por mi parte, reconozco al pueblo mapuche su pleno derecho a utilizar todas las formas de lucha para recuperar lo que les pertenece en justicia: recuperar sus territorios ancestrales y su autodeterminación. La injusta fuerza o violencia de los opresores y ladrones, destinada a mantener esta opresión, no ha de confundirse con la justa fuerza o violencia del oprimido destinada a su liberación. O’Higgins y Rodríguez lo tenían claro.

Que cada uno en su medio –obrero, estudiante de filosofía, pobladora, profesional- invente acciones de apoyo a nuestros hermanos mapuches despojados y oprimidos por terratenientes y empresarios y por este aparato de leyes y poderes que sirven a estos poderosos: esta máquina de terror y violencia organizados que se llama Estado. Es indispensable que logremos coordinar y unir nuestras múltiples y variadas acciones.
Que quienes son cristianos, como Miguel Woodward, puedan reconocer en los hermanos huelguistas mapuches el cuerpo y la persona misma de Cristo.
Si algún huelguista muere... ¡Bien aprovechada habrá estado su vida! ¡Será la más bella semilla plantada en la tierra!: la del sacrificio por la vida y la alegría del hermano oprimido.
Sin embargo, hermano, peñi, venceremos; venceremos, lamien, hermana no una vez, sino mari, diez veces: ¡Marichiweu!
¡Vivan todos nuestros pueblos indígenas de América Latina!
¡Ánimo, fuerza, newen! ¡Marichiweu!


Jaime
Profesor en América Latina.
Miembro del Grupo de Amigos de Miguel Woodward